El exceso de sudor, conocido como Hiperhidrosis o transpiración excesiva que se produce de forma espontánea, sin tener como causa las temperaturas altas o situaciones de tensión física o emocional, puede afectar al 2% de la población de raza blanca.

 

Las edades en las que se suele presentar oscilan entre los 25 y los 64 años y en un 40% de los casos suele ser hereditario.
La zona más controvertida donde se produce las axilas, ya que hay una alta concentración de glándulas sudoríparas en esta área.

 

La hiperhidrosis puede presentar distintos grados o niveles, en los pacientes:

Primer grado: El nivel de sudor es tal que no se nota ni impide la actividad normal del paciente.
Segundo grado: El paciente tiene un nivel de sudor tolerable, pero a veces impide su actividad normal.
Tercer grado: El sudor ya empieza a ser menos tolerable y con frecuencia impide la actividad normal del paciente.
Cuarto grado: El nivel de sudor ya no es tolerable e interfiere de manera continua en la actividad normal del paciente.

 

La hiperhidrosis tiene un impacto psicológico ya que puede acomplejar o interferir en la vida diaria de las personas que la padecen. Los pacientes suelen tomar una medidas o pautas especiales de comportamiento:

 
• Evitan situaciones que supongan un contacto físico, como por ejemplo, saludar con un apretón de manos.
• Reducen o limitan los movimientos de los brazos y adoptan posturas rígidas para ocultar la excesiva sudoración de las axilas.
• Les lleva a cambiarse varias vedes de ropa a lo largo del día.
• Evitan actividades que supongan sujetar o levantar objetos de manera permanente o que supongan un esfuerzo físico.

 

En Te Cuida Granada y hemos introducido un tratamiento novedoso, cuyo objetivo es inhibir la secreción de las glándulas sudoríparas con toxina botulínica, dejando una situación de normohidrosis o reducción de la sudoración en un 70%.

 
La infiltración del botox se realiza a través de agujas muy finas. Este tratamiento genera un bloqueo de la función de las glándulas sudoríparas, con lo cual, se reduce la producción de sudor en las zonas donde se inyecta esta sustancia.

El tratamiento tiene una duración de entre 15 minutos para cada axila.
Los resultados tienen una duración de unos 4-6 meses, dependiendo de la persona.

El paciente puede reanudar su actividad normal inmediatamente después del tratamiento, pero no hacer deporte ese mismo día.
Así que se acabó el problema de la sudoración excesiva.

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